Sí, sí. Me reitero en lo dicho y no es porque haya perdido el sentido de la realidad, ni porque me guste ir contracorriente, ni provocar (quienes me siguen saben que ése no es mi estilo).La Izquierda está de moda y lo demostraré con hechos:
La Izquierda acaba de ganar los comicios en Croacia y Eslovenia.
En Dinamarca, la victoria de la Izquierda ha puesto término a un período de diez años en que una coalición minoritaria de corte liberal-conservador gobernó gracias a que llegó a acuerdos informales con la extrema derecha, con el Partido Popular Danés (Dansk Folkeparti, DF).
En Francia, en la última cita electoral antes de las presidenciales del año que viene, la Izquierda francesa logró una victoria histórica al obtener, por primera vez en más de cincuenta años, la mayoría absoluta en el Senado.
François Hollande -el futuro rival de Nicolás Sarkozy en las próximas elecciones presidenciales francesas-ha dicho, junto a su homólogo alemán, que “Ganaremos juntos y si logramos tener éxito en nuestros respectivos países, el corazón de Europa cambiará”.
En Alemania, el Partido Socialdemócrata alemán (SPD) se prepara para gobernar Alemania en el 2013 avalado por las encuestas.
En Bélgica, el socialista Elio Di Rupo presidirá el nuevo gobierno belga formado por seis partidos.
En Italia, la Derecha de Berlusconi, ha salido por la puerta de atrás.
Y en España…podríamos decir aquello de “Spain is different”, pero quizás no lo sea tanto.
Fíjense si en España está también de moda, que en cuanto la Izquierda ha dejado de practicar lo que la ciudadanía considera “políticas de Izquierda”, ha ganado la Derecha. Lo que los ciudadanos y ciudadanas no quieren es ver una Izquierda débil, dubitativa, acomplejada, sumisa y mojigata. Lo que la ciudadanía demanda, reclama y necesita es una Izquierda fuerte, con carácter, con músculo, con personalidad, con autoestima, con orgullo, con autoconfianza y que no se doblegue ante nada ni ante nadie. Y ahora ¿No piensan ustedes también que la Izquierda está de moda?
